15-02-2015 La crónica del Juvenil

Ya había anochecido en el Miguel Sola este domingo cuando saltaron al campo los juveniles de

ambos equipos. Los locales con el buen sabor de boca del estupendo partido del preferente 

frente al Artajonés con victoria muy trabajada y merecida.

 

El partido prometía al enfrentarse dos rivales de la zona alta que aspiran a mantenerse ahí arriba. Sorprendían en la alineación los azules al colocar al central de delantero centro con más fuerza y altura. Estas dos cualidades le sobran a los de Arguedas y con eso juegan con balones altos y directos  y, sobre todo, a balón parado; pero fue en los primeros minutos por bajo en un rechace cuando se adelantaron tras un fuerte disparo que Iker no pudo sujetar. 

Los nuestros no se amilanaron por eso y comenzaron a imponer su dos grandes cualidades: el juego de centro de campo con Emilio, Yago y Adrián fabulosos; y la rapidez de los dos delanteros: Alex y Miguel. Jugada por la banda derecha y centro que no aciertan a rechazar los defensas y Alex, muy listo, remata a tres metros colocando el empate.

Los ánimos crecieron y los aurinegros desplegaron todo su potencial ofensivo desarbolando al rival y así en el 25 una jugada por la izquierda de Miguel provocó la rápida carrera y plantarse delante de Víctor para batirle de modo inapelable. 

 

Se conocía el camino y los nuestros jugaban de memoria lanzando balones al hueco para los dos delanteros y en el 31 de nuevo Miguel de manera muy similar se volvió a marchar de su defensor por la izquierda y ponía el 3- 1 en el marcador.  Así se completaba  la media hora más trepidante de toda la temporada para entusiasmo del público presente. Pero la fuerza de los de Arguedas  volvería a parecer en el 35 batiendo a Iker que nada pudo hacer ante el delantero en un rechace en el centro del área.

 

Tras el descanso las fuerzas se nivelaron : era la técnica, rapidez y garra de los de Azagra contra la potencia física de los de Arguedas y la balanza podía caer hacia cualquier lado. Una fuerte entrada de un medo rival provocó su expulsión directa y eso nos dio más margen el centro del campo para las penetraciones de Miguel por banda izquierda, el auténtico héroe del partido y en el  65 colocaba del mismo modo el 4-2. Todo parecía sentenciado pero el esfuerzo físico pasó factura y faltando diez minutos de nuevo la potencia física en el área hizo que el delantero rival se revolviese y marcase a dos metros. 

 

De ahí al final, nervios, falta de fuerzas, idas y venidas y al final una victoria que sabe muy bien por mantenernos en los puestos cabeceros.

 

Enhorabuena por tanto trabajo, esfuerzo y pundonor y mucho ánimo para los próximos partidos.